CRÓNICA REAL BETIS - SEVILLA F.C. (CÓMICA)

YA NO PISO MÁS EL CORTE INGLÉS

Los ocho días de oro al final serán en el Corte Inglés y, aunque su ropa me parezca vergonzosa, a partir de ahora iré a Carrefour y Alcampo.

No diría nada nuevo si me centrara en la superioridad que demostró y que por desgracia para todos los aficionados albiverdes, lleva demostrando el club del centro comercial.

No quiero ver el rojo en ningún sitio, es más, los extintores de mi piso los voy a tirar o a pintar de otro color, porque durante una temporadita no quiero acordarme del partidito de los coj…

Chaparro dijo en la previa del partido que la clave era dejar la portería a cero. Paco…amigo…, ¿le dejaste claro a tus jugadores CUÁL era la portería que había que dejar a cero?, que a lo mejor estaba un jugador a punto de tirar y se acordaba de que había que mantener la puerta a cero y entonces la tiraba fuera.

Esto tampoco es excusa ya que el Inter de la Palmera tiró casi nada entre los tres palos, en este caso y debido al nombre del portero, entre los cuatro “Palops”

Lo que sí puedo decir a favor del betis es que no se le puede decir a ningún jugador que no corriera, que no sudara la camiseta y si alguno no lo hizo no se notó, porque con la tromba de agua que caía en Heliópolis tenían las camisetas que más bien parecían tatuajes.

Quien sí sudó fue Fernando Vega, que cada vez que lo veo correr y se pone tan coloraillo que creo que se va a parar en una esquina, se va a poner a apretar y se va a convertir en Superguerrero cual Goku en sus mejores tiempos

Ahora toca centrarse en planificar la temporada que viene, en que todos rememos en la misma dirección para hacer del betis un equipo que tenga en la clasificación el mismo peso que como institución. Un club envidiable por tener una afición de diez, a veces con más puntería de la cuenta, pero con una familia increíble, capaz de dar lo máximo por defender el escudo de las trece barras. Trece barras que nos tienen atrapados a media ciudad, a pesar de los resultados.

Esta semana nos toca agachar la cabeza, aguantar el chaparrón y esperar a intentar enmendar el error en el próximo derbi, para este no vaticino ningún resultado ya que tengo más futuro como presentador de Bricomanía que como pitoniso.