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martes, 17 de marzo de 2009

¿ALEJANDRO MAGNO?...


Me cuesta pensar que este tío sea el mismo que escribió la canción con el título "Regálame la silla donde te esperé". Todos tenemos un pasado y los famosos no van a ser menos. Voy a aprovechar esta tribuna para meter el dedo en la llaga del oscuro pasado de algunos de los rostros más populares del momento. Para empezar, Alejandro Sanz.


Alejandro Sánchez era un joven que buscaba a finales de los 80 un hueco en el complicado mundo de la música. Lo terminaría encontrando en los 90 con el nombre de Alejandro Sanz pero previamente fue Alejandro Magno, una especie de mezcla entre cantautor juvenil y miembro locaza de Locomía, que facturó un disco llamado Los Chulos son pa’ Cuidarlos que tenía la dudosa portada de un jovencito engominado hasta los ojos, camisa de chorreras y chalequillo torero, así sin más. Pero lo peor no era eso, era el tracklist o lista de canciones con títulos como “Señor Papa, Micaela, Ajaulili, Tomasa o se busca un lío” entre otros hits. El disco es tan malo que podría hacer buena la carrera musical de Camela. También estaba la contraportada, Alejandro, con escasos 18 años, posaba con unos vaqueros modelo “el ombligo también cabe”, atados con un cinturón de tachuelas cutre cutre, una camiseta “Acid” muy de moda en los ochenta y una chaquetilla torera de lo más traumático. Suerte que luego le cambió un poco el chip y compuso grandes canciones que pasarán a la historia, pero hoy no voy a hablar de esas, sino de una del disco anteriormente mencionado, la canción es “Cuando navegamos” y que conste que me ha costado mucho decidirme.



“Cuando navegamos / se mueve el timón, / cuanto más lo mueves / más me muevo yo” (este preciosista cuarteto, junto a la áurea figura de Chanquete, fue decisivo para potenciar los deportes náuticos en España). El resto de sus letras no tiene precio, probad a descargároslo del emule más cercano ya que está retirado del mercado y, además, no creo que la SGAE os vaya a castigar por esa minucia descatalogada, ahora eso sí, no garantizo el perfecto funcionamiento de vuestro mp3 o Ipod.


Siento los traumas que haya podido crear...

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